Entrevista a Lucca Lanzara, fundador de Pico Fuel

Vista previa

Lucca Lanzara, fundador de Pico Fuel.

En exhilara.bike nos gusta conocer a las personas que, desde la pasión y la creatividad, están transformando el mundo del ciclismo y la aventura. Hoy hablamos con Lucca Lanzara, fundador de Pico Fuel, un proyecto nacido en Barcelona que propone geles energéticos 100% naturales, diseñados por un chef y pensados para quienes viven la vida como una aventura sin fin.

¿Cómo nació Pico Fuel y qué te inspiró a dar el paso de fundar tu propia marca de nutrición deportiva?

PICO nació de muchas horas en la bici y muchas horas en la cocina. Soy un apasionado del ciclismo y entreno unas 15 horas semanales. Eso significa que siempre llevaba geles en los bolsillos del maillot. Pero una y otra vez me encontraba con la misma frustración: sabores artificiales, texturas que no me convencían, productos pesados para el estómago y sin ninguna preocupación por el cuerpo ni por el medio ambiente.

Como ciclista y como cocinero, sentía que faltaba una alternativa real, natural y hecha con cariño. La idea del proyecto surgió de esa pregunta interna: cómo juntar mis dos pasiones, la bici y la cocina. Y como cocinero, no podía dejar de cuestionarme: “¿por qué no existe algo más real? ¿Y si estuviera hecho con ingredientes naturales? ¿No sería posible crear un combustible que además fuese rico, que te diera ganas de más?”

Quizás mi paso por la arquitectura también tenga que ver. Me enseñó a no conformarme con lo obvio, a buscar siempre soluciones distintas, más humanas y con sentido. Esa misma inquietud la llevé a PICO: no quería repetir lo que ya existía, sino construir algo nuevo, auténtico y coherente.

La inspiración vino de esa mezcla de pasiones, el ciclismo y la cocina, pero también de la montaña. De esa sensación de conquistar un pico, de llegar arriba con esfuerzo y disfrutar el momento. Eso es exactamente lo que quise poner en cada sobre de PICO: una explosión de sabor y energía, natural y digerible, que acompañe al deportista en sus propios retos.

Dices que Pico Fuel son geles “100% naturales”. ¿Qué significa exactamente eso en la práctica?

Cuando hablo de que PICO Fuel es 100% natural no es una frase vacía. Más que un lema, es una forma de trabajar. En la práctica significa que cada gel está hecho solo con ingredientes que cualquiera puede reconocer en su cocina. Desde el inicio tuve claro que no quería usar carbohidratos sintéticos como la maltodextrina ni saborizantes artificiales. En su lugar utilizo frutas reales, siropes naturales y sal mineral.

En la cocina creo que menos es más. Lo difícil no es añadir veinte ingredientes, sino cocinar algo rico con muy pocos. De esa simplicidad nacen nuestros geles: auténticos alimentos en formato líquido, que aportan la energía necesaria para conquistar cualquier reto sin generar complicaciones en la digestión.

Quise que fuese un producto tan transparente que, al leer la etiqueta, lo entendieras todo sin necesidad de traducir términos químicos. Eso lo hace más amable para el cuerpo, más fácil de digerir en pleno esfuerzo y más coherente con nuestra idea de alimentación real.

En resumen, “100% natural” en PICO Fuel significa energía real, hecha a mano con ingredientes de verdad, pensada para rendir en el deporte sin perder de vista la salud y el planeta. Porque comer también es un acto de amor: hacia el cuerpo, hacia la tierra, hacia el instante… y hacia uno mismo.

En la cocina creo que menos es más. Lo difícil no es añadir veinte ingredientes, sino cocinar algo rico con muy pocos

¿Qué importancia tiene, en tu opinión, la nutrición natural en el deporte de resistencia?

En los deportes de resistencia, la nutrición es casi tan importante como el entrenamiento. Puedes pasar horas acumulando kilómetros, pero si lo que pones en tu cuerpo no te acompaña, tarde o temprano lo vas a sentir en el rendimiento.

La nutrición natural aporta algo que va más allá de los números: conexión. Cuando comes ingredientes reales, digeribles y transparentes, no solo estás cargando los depósitos de energía, también estás cuidando tu cuerpo y tu salud a largo plazo. Y eso, en un deporte que exige tanta constancia, marca la diferencia.

Para mí, lo natural tiene que ver con confianza. Confianza de que lo que estás tomando en plena subida no te va a caer mal, confianza de que tu cuerpo lo va a asimilar bien, y confianza de que lo que consumes refleja también tus valores. Al final, el deporte de resistencia no es solo llegar más lejos, es también cómo llegas: con más disfrute, más conciencia y más coherencia.

Pico Fuel se presenta no solo como un gel, sino como parte de un estilo de vida. ¿Qué filosofía hay detrás del proyecto?

Desde el inicio quise que PICO Fuel fuese más que una marca de nutrición. Para mí representa una manera de vivir el deporte y la montaña: con autenticidad, respeto y disfrute. No se trata solo de llegar más rápido o más lejos, sino de cómo llegas y de lo que te llevas del camino.

La filosofía detrás del proyecto es simple: naturalidad, conexión y aventura. Naturalidad porque usamos ingredientes reales y transparentes; conexión porque creemos que la alimentación también es un puente con tu cuerpo y con el entorno; y aventura porque cada sobre de PICO Fuel está pensado para cuerpos que se mueven con propósito: competir, descubrir o conquistar un nuevo pico personal.

En el fondo, PICO Fuel no grita “máximo rendimiento”, sino que susurra “alto bienestar”.

La filosofía detrás del proyecto es simple: naturalidad, conexión y aventura

El diseño de la marca y el packaging también son muy distintivos. ¿Qué querías transmitir con ello?

Desde el principio tuve claro que el diseño de PICO Fuel tenía que reflejar lo mismo que hay dentro de cada sobre: una explosión, ya sea de sabor o de energía. Además, quise que llevara un guiño a mis orígenes brasileños, donde el color siempre está presente y la vitalidad se expresa también a través de lo visual.

Para mí, el packaging no es solo un envoltorio, sino la tarjeta de invitación a una experiencia única. Es parte de nuestra filosofía. A nivel estético, busqué transmitir esa mezcla de naturalidad y aventura, y al mismo tiempo dar una pista de lo que es realmente el producto: natural, auténtico y lleno de vida.

¿Cuál ha sido el mayor reto hasta ahora como emprendedor en este sector?

El mayor reto ha sido dejar atrás toda una carrera para apostar por un proyecto personal. Desarrollar un producto real que pudiera llegar a más personas no fue fácil: pasar de hacer pruebas en casa a cumplir con todo lo que exige la industria alimentaria, desde las normativas hasta la producción manual a escala, ha sido un camino lleno de aprendizajes, y todavía lo sigue siendo.

También está el desafío de abrirse espacio en un mercado dominado por grandes marcas y convencer al deportista de que lo natural no solo es posible, sino que funciona y sabe mejor. Ahí es donde la pasión y la paciencia se vuelven clave: escuchar mucho, mejorar cada detalle y pedalear con constancia, igual que en una subida larga. Puede que tardes, pero al final siempre llega el momento de coronar.

 ¿Qué le dirías a un ciclista o corredor que nunca ha probado geles naturales y que está acostumbrado a los productos convencionales?

Le diría que lo pruebe sin miedo. Que va a ser una experiencia sorprendente: desde el sabor y la textura hasta la digestibilidad y la energía que aporta. Quizás el primer sorbo le resulte distinto, pero pronto notará que el cuerpo se lo pide de nuevo.

PICO Fuel es otra experiencia: es como llevar comida real en el bolsillo, en un formato práctico y pensado para el deporte.

Y para terminar, ¿qué viene ahora para Pico Fuel?

Ahora viene quizá la parte más emocionante: salir de la cocina y de las mil pruebas para llevar PICO Fuel a más ciclistas y corredores. Me encantaría que estuviera presente en tiendas especializadas, en carreras y, sobre todo, en los bolsillos de quienes buscan una alternativa más natural. Como sueño, me ilusiona ver algún día a un equipo profesional que comparta nuestros valores llevando PICO Fuel en su maillot. Sé que es una carrera de gran fondo llegar hasta ahí, pero todo empieza con un sueño.

A corto plazo, seguimos perfeccionando sabores y escuchando mucho el feedback de la comunidad. Y a medio plazo, la idea es ampliar la familia de productos: más opciones naturales, siempre con la misma filosofía de simplicidad, autenticidad y respeto por el entorno.

En el fondo, lo que viene ahora es seguir pedaleando este proyecto con la misma pasión con la que nació: con la bici, la cocina y la montaña como brújulas.

Seguimos perfeccionando sabores y escuchando mucho el feedback de la comunidad

CUESTIONARIO PERSONAL:

  • Película favorita: Elegir una sola película me parece muy difícil. Mi novia trabaja en el sector y mi padre también, así que he visto muchísimas películas desde niño. Pensando en los últimos años, varias me vienen a la cabeza, pero hay algunas que me marcaron y he visto más de una vez: Django, Into the Wild, Little Miss Sunshine y Free Solo

  • Libro favorito: La verdad sobre el caso de Harry Quebert // Joel Dicker.

  • ¿Qué es para ti compartir?

    Compartir es una manera de decir “estamos juntos”, ya sea en el deporte, en una cena o en una cocina. Es estar junto a alguien en un momento único, que después solo quienes lo vivieron sabrán realmente lo que fue.

    Eso es lo que intento con mis geles: compartir un poco de mis experiencias y de mis valores, para que acompañen también a otros en sus propios momentos.

  • ¿Qué es lo que más valoras en una persona? Lo que más valoro en una persona es la autenticidad y la pasión. Cuando alguien se mueve con propósito, ya sea en el deporte, en el trabajo o en la vida, esa energía se contagia y hace que todo tenga más sentido.

  • ¿Tu bici favorita? Mi bici favorita es la mía: una Factor O2 que monté a la carta. Elegí cada pieza con mucho mimo y cariño, así que más que una bici es un proyecto personal sobre dos ruedas.









Esta entrevista forma parte de la serie de entervistas Exhilara Bikers, donde descubrimos la cara más genuina de ciclistas vinculados con los valores de aventura, superación, compromiso y sostenibilidad del proyecto Exhilara.

Siguiente
Siguiente

Qué comer si no eres Pogacar: guía realista para ciclistas